jueves, 4 de diciembre de 2008

Carlos Fuentes, 80 años

El maestro Carlos Fuentes

Palabras del consagrado escritor mexicano Carlos Fuentes el lunes 17 de noviembre de 2008 al auditorio en Ciudad de México, con motivo del homenaje recibido en sus 80 años de existencia. Su conferencia, a la cual concurrieron personalidades del mundo intelectual, fue titulada "Novedades del Pasado" por el Diario "El Universal" de México.

"Señor Presidente, señoras y señores.

Agradezco al Presidente Felipe Calderón que encabece este acto en el Alcázar de Chapultepec.

La censura es como una hiedra venenosa que se arrastra por el suelo hasta encontrar pared y entonces sube, invade la fachada, entra por las ventanas y nos deja sin luz.

El Artículo 7º de la Constitución Mexicana declara inviolable la libertad de escribir y publicar escritos sobre cualquier materia. Añade, que ninguna ley ni autoridad puede establecer la previa censura ni coartar la libertad de imprenta, que no tiene más límites que el respeto a la vida privada, a la moral y a la paz pública.

Hace poco tiempo un libro mío fue objeto de un acto de censura mínimo, mínimo, en sí mismo baladí, pero como todo acto de censura ominoso como señalo.

Quiero recordar que muchas personas se manifestaron en contra de este conato de prohibición y que una de ellas fue Felipe Calderón, entonces legislador, quien leyó en público, leyó en público pasajes del libro en cuestión, Aura. Una simple historia de amor que no le faltaba el respeto a la vida privada ni perturbaba la paz pública, aunque sí, lo admito podía perturbar la moral de las buenas conciencias.

Hoy vuelvo a agradecerle su defensa al Presidente Calderón y evoco en su presencia esta consideración.

En democracia se manifiestan legítimas oposiciones, debates partidistas y propuestas diversificadas.

Sin mengua de esta pluralidad, acaso sea posible considerar un grado de unidad en torno a tres fechas del año 2010: el Bicentenario de la Independencia, el Centenario de la Revolución y los 100 años de la actual Universidad.

Las tres conmemoraciones, señor Presidente, ocurrirán durante su mandato y acaso nos ofrecen a todos gobernantes y gobernados, poderes y oposiciones. La oportunidad de reflexionar sobre lo que nos une como mexicanos, sin desdeñar lo que nos diferencia como ciudadanos.

Tal es, señor Presidente Calderón, mi sincero voto en esta ocasión que nos reúne bajo el siglo de una cultura hecha por todos.

Cuando yo empecé a publicar, dos argumentos contrapuestos ocupaban al mundo literario. Uno, muy ubicado en México y en la América Latina oponía nacionalismo y universalidad, ésta, denominada con intención peyorativa cosmopolita.

El otro argumento, más europeo y radicado en las teorías de Sartre oponía el compromiso social y político al acto gratuito del arte por el arte. La exclamación perentoria de un crítico literario de aquella época resume esta actitud: el que lee a Proust, se prostituye.

Siento que esta vieja disputa está superada y bastó la mejor novela mexicana de todos los tiempos, Pedro Páramo, de Juan Rulfo, para demostrar que un tema y unos personajes de la provincia mexicana, Comala, poseían la dimensión de la gran literatura mundial, ser destino legible. Pero demás, la temática y los personajes de Balzac son franceses; ingleses los de Dickens; rusos los de Dostoievsky; alemanes los de Mann.

¿Por qué trascienden estos autores sin dejar de representarlos su origen nacional y nos hablan a todos los lectores? ¿Por qué?

Porque nos dan imaginación y nos dan lenguaje. Y sin imaginación y lenguaje no sólo no hay literatura, no hay lectores, en el sentido radical de darle vida a lo escrito ayer, mediante la lectura hoy. Pregunto: Por qué si la palabra y la imaginación no importan, lo primero que hace un régimen totalitario es quemar libros, encarcelar y exiliar escritores.

La otra cara de la disputa literaria de aquel medio siglo tenía que ver con la literatura como compromiso político en contra del arte por el arte.

Mi primer libro: Los Días Enmascarados, recibió ataques por ser un ejercicio gratuito de la fantasía, ajeno a los problemas sociales de México; mi segundo libro: La Región Más Transparente, recibió, en cambio, severas críticas por ser una novela en exceso política y preocupada por los problemas sociales de México.

Dios mío, exclame entonces, a los 28 años de edad. Dios mío, dónde estará la verdad. La verdad estaba en Nadine Gordimer, empecé a leer sus novelas, muy conciente de que esta era una escritora sudafricana; es decir, ubicada en un país donde regía el racismo, la discriminación política y sexual, el abuso del poder y la negación de la libertad.

Cómo no iban a responder las novelas de Nadine a esta circunstancia. Cómo no iban a hacer una clamorosa afirmación de la igualdad de las razas, los derechos del cuerpo y el espíritu, y la libertad del ciudadano si La Hija de Burger, El Conservacionista y la Gente en Julio eran todo esto.

Una sociedad entera, recreada, retratada, pero elevada al rango literario y salvada de la mera denuncia panfletaria por la imaginación y por el lenguaje, que convertían a cada una de las obras de Nadine Gordimer en creaciones insustituibles, en novelas indispensables como literatura, primero, y sólo después, como todo lo demás.

Una literatura de la paradoja crítica. Gordimer por ejemplo, imagina el revés de la trama histórica. En una Sudáfrica futura una familia blanca huye del racismo negro y encuentra refugio en la aldea de su antiguo sirviente de color.

Y el libro más reciente de Nadine, que acaba de salir de la imprenta, nos informa que en una décimo sexta parte de su sangre, Beethoven también era negro. Es decir, en las novelas de Nadine la paradoja salva al arte para mejor servir a la ciudad.

Esta es la carne del cuerpo político, el alma de la posición ciudadana, la vida otorgada por la obra, por la palabra en la obra de Nadine Gordimer, y en Karma, Karma que es una obra maestra de la novela breve, la suma de los tiempos históricos nos indica todo lo que dejamos de hacer y todo lo que nos falta por hacer.

Cito a Nadine: soy un ser anciano que vuelve a ser niño, descubro que regreso como hombre o que regreso como mujer para continuar la experiencia humana en otro tiempo, en otro espacio, descubro que el sexo es sólo una de las formas del regreso, fin de cita.

Sí, todo esto, toda esta gran obra de la creación literaria en Nadine Gordimer y, al mismo tiempo, la más altiva conciencia ciudadana contra el racismo, contra el prejuicio, contra la discriminación por la libertad del cuerpo y del alma.

Nadine Gordimer, bienvenida a México, querida amiga. Todas las edades son formativas, pero acaso ninguna tanto como la etapa en que se pasa de la infancia a la juventud por vía de la adolescencia.

Yo viví en la República de Chile, entre los 11 y los 15 años de edad. En Chile encontré la fraternidad de la democracia con la palabra. El Gobierno del Frente Popular impulsaba el desarrollo económico con democracia política, pero ambos, desarrollo y democracia eran inseparables en Chile de la palabra.

Como decía Pablo Neruda, lo cito: para vosotros todos, para vosotros canto, que sea repartido todo el canto en la tierra. Repartir el canto. ¿Cómo? Salvador Allende y la Unidad Popular creyeron que se podía avanzar hacia una sociedad más justa, desde la institucionalidad democrática, ampliando el radio de la ley, apelando a las formas de la libertad.

Salvador Allende, un hombre, nos dice Ricardo Lagos, lo cito, que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que se respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. Fin de cita.

En mi ánimo, Chile quedó para siempre como el país donde la política y la palabra no eran enemigas, por eso cuando la dictadura militar le arrebató al pueblo chileno la libertad política y le silenció la palabra libre, yo siempre mantuve la convicción de que tarde o temprano, ahora violadas por Pinochet, política y palabra resucitarían hermanadas en Chile.

Durante la presidencia de Ricardo Lagos, la autoridad judicial se encargó de castigar el pasado, y el poder ejecutivo se encargó de construir el futuro, crecimiento con libertad.

Porque no basta el crecimiento, por sí solo no asegura mayor igualdad, hacen falta, también, políticas públicas; hacen falta políticas laborales y distributivas para disminuir la pobreza.
No se trata de empobrecer a los ricos, sino de enriquecer a los pobres.

Se requiere un esfuerzo constante para asegurar que el desarrollo económico tome en cuenta los objetivos sociales. Tal fue la política del Presidente Lagos. Ricardo Lagos, chileno, bienvenido a México. Bienvenido. El 20 de noviembre de 1975 era yo Embajador de México en Francia y mandé izar la bandera al frente de la Embajada, pronto llegaron las llamadas de mis colegas latinoamericanos. Me decían: ya sabemos que México no tiene relaciones con Franco, me reclamaron, con España; pero poner la bandera a plena asta el día de la muerte de Franco, no le parece excesivo.

No, les expliqué, no se trata de Francisco Franco, sino de Francisco Madero y la Revolución Mexicana. Ese día mi esposa y yo cenamos con André Malraux, el novelista de La Condición Humana; el combatiente de la guerra de España; El cineasta, junto con Max Aub, de L’ Espoir, el Ministro de Cultura del General De Gaulle.

Y Malraux se mostró, particularmente, pesimista ese 20 de noviembre. Franco, dijo, mantenía el orden, un orden brutal en un país anarquista, como España. Al morir Franco, España regresará a la anarquía y el desorden. La anarquía, concluyó Malraux, es la vocación de España. Por fortuna, Malraux se equivocó. Con gran coraje y perspicacia el Rey Juan Carlos le dio representación a toda la gama de la política española, de la derecha de Fraga Iribarne, a la izquierda de Santiago Carrillo, del conservadurismo de Adolfo Suárez, al socialismo de Felipe González.

Se trataba de llegar a un pacto republicano en torno a la monarquía, como ha escrito Juan Luis Cebrián; y a una monarquía de los ciudadanos, como propuso Felipe González.

Ya en régimen de democracia y durante 13 años, Felipe González presidió el Gobierno español. Negoció el ingreso de España a la Comunidad Europea, a condición de que Europa le diese a España lo que España necesitaba para ingresar a Europa; no con ventajas, aunque sí con oportunidades: infraestructura, carreteras, escuelas modernas, hospitales, medios de comunicación; lo que debe exigir un tratado de mutua conveniencia.

Si hoy España es miembro pleno y estelar de la Comunidad Europea, en grandísima medida se le debe a Felipe González. No estatizó la economía para no sofocar las ventajas, pero fortaleció al Estado para impedir las desventajas, acertada receta para lo que sucede hoy.

González asoció a España con el occidente después de los años de hielo y oportunismo del franquismo, pero manteniendo un margen muy grande de independencia para las decisiones del Estado español.

España ha sido consecuente en lo positivo e independiente en lo negativo. No hay tropas españolas en Irak. Y es que la acción internacional de Felipe González se guía por este principio: el mal amigo engaña y halaga; el buen amigo lo es porque dice la verdad. Saludo y agradezco la presencia del gran amigo y estadista, Felipe González.

Yo le debo a la Universidad Nacional Autónoma de México una parte de mi ser personal y de mi vocación ciudadana. En ella aprendí a dar a conocer para conocernos, a saber para sabernos, a recordar para recordarnos.

Nadie en el pasado inmediato ha encarnado este espíritu mejor que Juan Ramón de la Fuente, rector de la UNAM entre 1999 y 2007, cuyo credo, lo cito: nos recuerda que la responsabilidad social y su evolución, los derechos civiles y su fuente de legitimación, nuestra conciencia y la visión de los ciudadanos, a los que nada puede ocultarse, definirán los temas políticos más importantes de nuestro país y en nuestro tiempo. Fin de cita.

Juan Ramón de la Fuente, el científico, el humanista, conoce de sobra estos problemas y estos logros, y por eso sabe que no hay educación válida que al cabo no se encamine a resolver los problemas y acrecentar los logros.

Y por ese motivo no puedo separar a de la Fuente el educador, el rector, del ciudadano que reclama una cultura política fuerte a la altura de la esperanza en el país que teníamos los estudiantes universitarios en 1950, y que amenaza con perderse en los oscuros laberintos del narcotráfico, el crimen organizado y la impunidad.
Doy la bienvenida y doy las gracias por su presencia a mi querido amigo, Juan Ramón de la Fuente.

Se han dado cita en este evento grandes escritores de mi generación, grandes amigos también, a los que agradezco profundamente su presencia; también asisten escritores de la nueva generación mexicana y latinoamericana.

Nos une, acaso, la exigencia crítica de la escritura. Crítica no como adversidad o negación solamente, que puede serlo, sino crítica como creación de un mundo paralelo a la realidad cotidiana.

Crítica como llamado de una realidad olvidada o potenciada. Aquí estoy, me llamo Alonso Quijano, recuérdenme, mi nombre es Hamlet, no me juzguen, soy Madame Bovary, imagínenme, soy Sophie’s Choice.

Crítica como advertencia de que hay más cosas en el cielo y en la tierra, Horacio, que las soñadas en tu filosofía. Crítica como insatisfacción con lo dado y como interrogante de lo recibido.

Crítica como conocimiento de la realidad que desborda la experiencia o aún no la alcanza, anuncia la experiencia, denuncia, pero no renuncia.

Modesta crítica, soberbia crítica; limitada y limitante crítica, y crítica interna de la propia literatura. La literatura es autónoma o producto de la historia; la literatura es experiencia moral aún cuando se nutra del mal y lo represente, qué tan bueno es el Príncipe Mishkin que tan malo es el asesino Raskolnikov.

La literatura crea, refleja, imagina, juzga, une o separa. En todo caso, una vieja tradición indica que los viejos damos lecciones jóvenes.

Yo quisiera más bien que los jóvenes me dieran lecciones a mí. Ellos van a ver un mundo que yo ya no veré, ellos nos traen las noticias del porvenir. Nosotros, los mayores, aseguramos, sin embargo, que no se olviden las novedades del pasado.

El calendario nos engaña, distrae y conforta proponiendo un simple tiempo lineal que va del pasado, al presente, al porvenir. La literatura es una constante rebelión contra el tiempo como flecha dirigida al futuro, convirtiéndolo en mirada que le devuelve actualidad al pasado y posibilidad al porvenir, en memoria de todo lo que el pasado dejo de decir.

La literatura es la advertencia trágica de las fallas y limitaciones de toda empresa humana, es afirmación de lo que el olvido, la premura, o la tiranía del tiempo pasó por alto.

Significa el rechazo de la cómoda noción del fin de la historia, que nos invita a abandonar las armas de la esperanza crítica y aceptar amodorrados la beatitud del mundo tal como es.

Yo creo que el escritor habla del mundo que puede ser si le damos la oportunidad a nuestra potencia creadora, a nuestra insatisfacción con las demoras de la ciudad hacia la ciudad, a nuestra voluntad de abrir las puertas de la imaginación para no contentarnos con una sociedad que quiere divertirse hasta la muerte y olvidar hasta el olvido.

La literatura es el frágil baluarte de la palabra y de la imaginación contra la comodidad y la renuncia, contra la tontería, el sectarismo y la mirada estrecha, contra el rencor y la envidia.

Leo, leo a estos jóvenes escritores que nos acompañan en estas jornadas y pienso que acaso nosotros, los mayores, no hemos hecho otra cosa que escribir en honor de nuestros antepasados, pero también en honor de nuestros descendientes.

Somos acaso, como lo serán ellos, los jóvenes, fuentes entre lo que fue, lo que es y lo que puede ser, pues en la literatura quién se atrevería a pensar que es el dueño del tiempo. Esta simple reflexión le da a nuestro trabajo literario la frágil gloria de no saberse absoluto, sino apenas relativo mediador de la tradición que requiere de nueva creación para prolongarse en el tiempo.

La literatura nos dice que podemos conocer al mundo, pero sólo si somos capaces de imaginar al mundo. Y a pesar de todo, de amar al mundo.

Actos de amor al mundo son las grandes novelas de mi amigo Gabriel García Márquez. Somos camaradas desde hace más de 40, años cuando en la pelusa de un jardín en San Ángel renunciamos a toda ocupación que interrumpiera nuestra vocación.

Escribir novelas, creer en la literatura, darle forma verbal a la gran selva de lo no dicho, sobre todo en una América Latina de evasiones, retórica, buenas intenciones y malos propósitos.
Porque Gabriel demostró en Cien Años de Soledad, en El Amor en Tiempos del Cólera, que la imaginación literaria es indispensable para integrar la imaginación política y, sobre todo, para darle vuelo a la imaginación social.

Si algún día un crítico pudo decir Latinoamérica, novelas sin novelistas; hoy gracias a autores como Gabo, la realidad puede asumirse a sí misma y la literatura también.
El novelista no sustituye al político, pero el político tampoco sustituye al novelista.

Cuestión de perspectiva, cuestión de distancia. Por eso es indispensable el diálogo a todos los niveles: político, social, cultural.

La extraordinaria obra de García Márquez, y con él, la de los grandes escritores que hoy nos acompañan, nos indica que en el centro del tiempo, en el centro del tiempo el escritor recuerda que nadie tiene el poder absoluto ni la razón suficiente aunque todos nos hacemos preguntas para darle poder a la palabra e imaginación al poder.

Porque somos parte de una vasta voluntad ciudadana que es, ni más ni menos, que la de asegurar la constante resurrección del mundo.

Quiero agradecer, antes de terminar, muy especialmente, la presencia de mi queridísimo amigo, Gabriel García Márquez. Señor Presidente, señora de Calderón. Distinguidos participantes en estas jornadas. Señoras y señores. Le agradezco al Presidente Calderón su presencia en este acto.
Les agradezco a los espléndidos participantes en las 17 mesas del evento: escritores, pensadores, periodistas, artistas, editores, su talento, su entusiasmo, su aportación a la cultura viva de mi país.

Le agradezco en estos últimos años su apoyo indispensable, su amorosa contribución a mi vida y a mi trabajo, a mi esposa Silvia y a mis hijos: Cecilia, Natasha y Carlos. A los viejos amigos, les saludo al atardecer. A los jóvenes amigos, les doy la bienvenida al amanecer. Muchas gracias".

jueves, 25 de septiembre de 2008

Déjà vu

Para otros usos de este término, véase Déjà Vu (desambiguación).

El término déjà vu (/deza vy/, en francés ‘ya visto’) o paramnesia describe la experiencia de sentir que se ha sido testigo o se ha experimentado previamente una situación nueva. Este término fue acuñado por el investigador psíquico francés Émile Boirac (1851-1917) en su libro L'Avenir des sciences psychiques (‘El futuro de las ciencias psíquicas’), basado en un ensayo que escribió mientras estudiaba en la Universidad de Chicago.

Contenido:

1 Generalidades
2 Tipos de déjà vu
2.1 Déjà vécu
2.2 Déjà senti
3 Investigación científica
3.1 Relaciones con desórdenes
3.2 Farmacología
3.3 Explicaciones basadas en la memoria
3.4 Teorías neurales
4 Investigación pseudocientífica
4.1 Parapsicología
4.2 Sueños
4.3 Reencarnación
5 Fenómenos relacionados
5.1 Jamais vu
5.2 Presque vu
5.3 L'esprit de l'escalier
6 Referencias en la cultura popular
7 Notas
8 Véase también
9 Enlaces externos

Generalidades

La experiencia del déjà vu suele ir acompañada por una convincente sensación de familiaridad y también por una sensación de «sobrecogimiento», «extrañeza» o «rareza». La experiencia «previa» es con frecuencia atribuida a un sueño, aunque en algunos casos se da una firme sensación de que la experiencia «ocurrió auténticamente» en el pasado.


La experiencia de déjà vu parece ser muy común. En estudios formales, el 60% o más de la población afirma haberla experimentado al menos una vez.[1] También se encuentran referencias a la experiencia de déjà vu en literatura del pasado, lo que indica que no es un fenómeno nuevo. Ha sido extremadamente difícil invocar la experiencia del déjà vu en el laboratorio, por lo que se han realizado pocos estudios empíricos. Recientemente, los investigadores han hallado formas de recrear esta sensación usando hipnosis.[2]

Tipos de déjà vu Según Arthur Funkhouser hay dos tipos principales de déjà vu: [3]

Déjà vécu

Normalmente traducido como ‘ya vivido’ o ‘ya experimentado’, el déjà vécu se describe en una cita de
Dickens:

Todos tenemos alguna experiencia de la sensación, que nos viene ocasionalmente, de que lo que estamos diciendo o haciendo ya lo hemos dicho y hecho antes, en una época remota; de haber estado rodeados, hace tiempo, por las mismas caras, objetos y circunstancias; de que sabemos perfectamente lo que diremos a continuación, ¡como si de pronto lo recordásemos![4].

Cuando la mayoría de la gente habla de déjà vu lo que realmente experimentan es un déjà vécu. Las encuestas han revelado que hasta el 70% de la población ha tenido estas experiencias, normalmente en edades de 15 a 25 años, cuando la mente aún está sujeta a advertir el cambio en el entorno.
[5] La experiencia suele estar relacionada con un suceso muy banal, pero es tan impactante, que se recuerda durante años.

El déjà vécu alude a una experiencia que incluye más que la simple vista, por lo que etiquetarla como déjà vu suele ser inexacto. La sensación incluye una gran cantidad de detalles, percibiéndose que todo es exactamente como fue antes.

Más recientemente, el término déjà vécu ha sido usado para describir sentimientos muy intensos y persistentes de un tipo de déjà vu, que suceden como parte de un desorden de memoria.[6]

Déjà senti

Este fenómeno alude a algo ‘ya sentido’. A diferencia de la precognición implícita al déjà vécu, el déjà senti es primordial o incluso exclusivamente un suceso mental, carece de aspectos precognitivos y rara vez permanece en la memoria de la persona que lo experimenta.


El Dr. John Hughlings registró las palabras de uno de sus pacientes que sufría epilepsia del lóbulo temporal o psicomotora en un ensayo de 1889:


"Lo que ocupa la atención es lo que la ha ocupado antes, y de hecho ha sido familiar, pero ha estado olvidado durante un tiempo y ahora se recupera con una leve sensación de satisfacción como si se hubiese estado buscando. Al mismo tiempo, o más exactamente en una secuencia inmediata, advierto sutilmente que el recuerdo es ficticio y mi estado anormal".

"El recuerdo siempre empieza gracias a la voz de otra persona o a mi propio pensamiento verbalizado o a lo que estoy leyendo o verbalizando mentalmente, y creo que durante el estado anormal suelo verbalizar alguna frase de simple reconocimiento como «Ah, sí: ya veo» o «Por supuesto, ya recuerdo», pero un minuto o dos después no puedo recordar ni las palabras ni el pensamiento verbalizado que dio lugar al recuerdo. Sólo hallo la fuerte sensación de que se parecen a lo que he sentido antes bajo parecidas condiciones anormales".

"Al igual que el paciente del Dr. John Hughlings, algunos epilépticos del lóbulo temporal pueden experimentar este fenómeno".

Investigación científica

En los últimos años el déjà vu ha sido sometido a seria investigación psicológica y neurofisiológica. Su explicación más plausible es que el déjà vu no es un acto de «precognición» o «profecía» sino más bien una anomalía de la memoria: la impresión de que una experiencia está «siendo recordada». Esta explicación se ve corroborada por el hecho de que en la mayoría de los casos la sensación de «recuerdo» en el momento es fuerte, pero las circunstancias de la experiencia «previa» (cuándo, dónde y cómo ésta ocurrió) resultan bastante inciertas.

Asimismo, a medida que el tiempo pasa, los sujetos pueden exhibir un fuerte recuerdo de haber sufrido la «perturbadora» experiencia de déjà vu en sí misma, pero ningún recuerdo de los sucesos o circunstancias específicas que estaban «rememorando» cuando tuvieron dicha experiencia.

En particular, puede ser el resultado de un solapamiento entre los sistemas neurológicos responsables de la memoria a corto plazo (sucesos que se perciben como pertenecientes al presente) y los responsables de la memoria a largo plazo (sucesos que se perciben como pertenecientes al pasado).

Muchos teóricos creen que la anomalía de la memoria sucede cuando la mente consciente de uno tiene un ligero retraso en la recepción de las entradas perceptivas. En otras palabras, la mente inconsciente percibe el entorno antes que la mente consciente. Esto provoca que la propia consciencia perciba algo que ya está en la memoria, incluso a pesar de que lo esté sólo un instante de diferencia con la percepción.

Relaciones con desórdenes

Se ha encontrado una correlación clínica entre la experiencia de déjà vu y desórdenes tales como la esquizofrenia y la ansiedad,[7] y la probabilidad de sufrirla se incrementa considerablemente en sujetos que están en tales condiciones. Sin embargo, la asociación patológica más fuerte del déjà vu es con la epilepsia del lóbulo temporal.[8] [5]

Esta correlación ha llevado a algunos investigadores a especular que la experiencia de déjà vu es posiblemente una anomalía neurológica relacionada con descargas eléctricas indebidas en el cerebro. Así como la mayoría de la gente sufre un episodio epiléptico leve (es decir, no patológico) regularmente (por ejemplo, la repentina «sacudida» que ocurre con frecuencia justo antes de caer dormido o sacudida hipnagógica), se ha conjeturado que una (leve) aberración neurológica similar ocurre en la experiencia de déjà vu, dando como resultado una sensación de memoria errónea.

Farmacología

Se ha informado que ciertas drogas incrementan las posibilidades de experimentar un déjà vu. Algunos fármacos, cuando se combinan, también provocan déjà vu. Taiminen y Jääskeläinen (2001) informaron del caso de un hombre por lo demás sano que empezó a experimentar intensas sensaciones de déjà vu recurrentes cuando tomaba amantadina y fenilpropanolamina para aliviar los síntomas de la gripe. Encontró la experiencia tan interesante, que completó el tratamiento e informó a los psicológos, quienes lo recogieron. Debido a la acción dopaminérgica de los fármacos y los hallazgos previos de estimulación por electrodos del cerebro (por ejemplo, Bancaud, Brunet-Bourgin, Chauvel y Halgren, 1994), Taiminen y Jääskeläinen especulan que el déjà vu sucede como resultado de la acción hiperdopaminérgica en la zonas mesial y temporal del cerebro.

Explicaciones basadas en la memoria

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Teorías neurales

A finales del siglo XIX y principios del XX, era ampliamente considerado que el déjà vu podia ser causado por lapsos temporales en la sinapsis
neuronal. Se pensaba que este lapso llevaba al cerebro a creer que estaba sufriendo un estimulo por segunda vez, cuando de hecho, estaba simplemente re-experimentando el mismo evento de una fuente ligeramente retardada. Existe un gran numero de variaciones de esta teoria, con fallos en la comunicacion de los dos hemisferios del cerebro y una sinapsis neuronal anormalmente rapida como explicaciones de la sensacion. Tal vez la teoria neuronal mayormente aceptada es la teoria de retraso en el recorrido optico, que explica el déjà vu como el producto de una entrada optica retardada de un ojo.

Investigación pseudocientífica

Parapsicología

El déjà vu se asocia con la precognición, la clarividencia o las percepciones extrasensoriales, y se lo cita frecuentemente como evidencia de aptitudes «psíquicas» en la población en general. Explicaciones no científicas atribuyen la experiencia a la profecía, las visiones (como las recibidas en sueños) o recuerdos de una vida anterior.

Sueños

Sostienen algunos que el déjà vu es la memoria de los sueños. Aunque la mayoria de sueños nunca son recordados, una persona que duerme puede presentar un gran despliegue de actividad en zonas cerebrales relacionadas con el proceso de la memoria de largo plazo. Se ha especulado que los sueños "leen" directamente de la memoria de largo plazo, soslayando la memoria a corto plazo.

En este caso, el déjà vu pudiera ser una memoria de sueños olvidados con elementos comunes a la experiencia que se vive en el estado de vigilia. El deja vu, se da en los sueños muchas veces porque nuestro cerebro nos está informando de algo que piensa, pero no lo piensa conscientemente y simplemente nos advierte.

Tambien están generados los dejá vu por ideas que provienen del instinto (por ejemplo, en sueños durante la adolescencia hacemos el amor, lo cual a su vez es un aprendizaje para cuando llegue la ocasión). Cuando esa situación se presenta, porque las situaciones se suceden nuevamente en la vida muchas veces, estamos preparados porque están almacenadas en el recuerdo, aunque nunca hayan sucedido y sean solo una ideación subconsciente.

Reencarnación

Los creyentes en la reencarnación teorizan que el déjà vu es causado por fragmentos de vidas pasadas que afloran a la superficie debido a situaciones o personas familiares. Otros teorizan que el fenómeno es causado por la proyección astral o experiencias extracorporales, siendo posible que los individuos visiten lugares en sus cuerpos astrales durante el sueño.

Fenómenos relacionados

Jamais vu

Jamais vu (‘nunca visto’): es no recordar explícitamente haber visto algo antes. La persona sabe que ha ocurrido antes, pero la experiencia le resulta extraña.

Presque vu

Presque vu (‘casi visto’): es casi recordar algo, pero sin llegar a hacerlo. Éste es el sentimiento de tenerlo «en la punta de la lengua».

Es mencionado habitualmente por personas que sufren de epilepsia u otras enfermedades relacionadas con ataques cerebrales.

L'esprit de l'escalier

Artículo principal: L'esprit de l'escalier

Referencias en la cultura popular

En la película Matrix el déjà vu es un fallo perceptible en el sistema que sucede cuando alguien realiza reconfiguraciones y ajustes en Matrix.

En la película Déjà Vu (2006), protagonizada por Denzel Washington, el fenómeno se explica como advertencias enviadas desde el pasado o pistas para el futuro.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Guerra de nervios: soviéticos en el Caribe

Tanto Moscú como Caracas han tratado de minimizar el asunto al máximo. Sin embargo, cuando ambos gobiernos anunciaron esta semana su intención de realizar ejercicios militares conjuntos en las aguas del Caribe a finales de este año, el escalofrío -con sus inevitables referencias a Cuba y los años de alta tensión con la ex Unión Soviética- fueron inevitables. CNN, por ejemplo, presentó la noticia con gran despliegue y acompañada con imágenes del presidente John F. Kennedy y el bloqueo naval que hizo Estados Unidos a buques soviéticos que se aproximaban a La Habana en octubre de 1962.

Aunque la comparación es exagerada, el hecho no esconde lo delicadas que están por estos días las relaciones entre Washington y el Kremlin. Se trata del despliegue militar más grande de Rusia en el Hemisferio Occidental en más de 40 años. Según Moscú y Caracas, entre el 10 y el 14 de noviembre cuatro buques de la armada rusa -incluidos el crucero lanzamisiles Pedro el Grande, el buque antisubmarino Almirante Chebanenko y un buque cisterna- atracarán en puertos venezolanos para reabastecerse de combustibles y realizar ejercicios de entrenamiento.


Hay planes, además, para que bombarderos rusos de largo alcance aterricen en aeropuertos venezolanos. En total, unos mil militares rusos harán parte de la operación. Caracas, por su parte, participaría con algunas fragatas, escuadrones patrulleros y de transporte, así como unidades aeronavales y submarinas.

Los objetivos de ambos países son diferentes, pero se retroalimentan. Moscú tiene pelea cazada con Estados Unidos por lo que considera la intromisión estadounidense en su patio trasero desde la disolución de la Unión Soviética. Por un lado, están sus planes de instalar bases antimisiles en Polonia y República Checa. Y por el otro, el reconocimiento y alianza con ex repúblicas de la URSS como Georgia y Ucrania, y la expansión de la OTAN a naciones como Bulgaria o Rumania.

Rusia, incómoda

Al estrechar su alianza militar con Venezuela, los rusos le recuerdan a Estados Unidos que ellos, también, poseen capacidad para manosear sus áreas de control geoestratégico. De acuerdo con el Consejo para las Relaciones Internacionales, es una retaliación por el reciente envió de buques de guerra a las costas de Georgia tras la invasión rusa a este país hace un mes.


"Rusia -dice Michel Shifter, del Diálogo Interamericano- está muy incómoda por la creciente presencia de EE.UU. en el mar Negro. El nacionalismo ruso, que ha despertado, quiere flexionar los músculos y mostrarle a Washington que poseen capacidad para realizar alianzas en su patio trasero".

A Chávez, la renovada tensión entre las dos potencias le cae como anillo al dedo. De acuerdo con Ann Gilmour, de Jane's Inteligence Review, la aspiración del presidente venezolano es neutralizar la influencia de EE.UU. en la región. Y ve una amenaza en la reactivación de la Cuarta Flota de la Armada estadounidense, que llevaba anclada más de tres décadas, pero comenzó a patrullar nuevamente las aguas del Caribe este verano.

"Al permitir que los buques rusos atraquen en puertos venezolanos, Chávez envía el mensaje de que EE.UU. no es la única potencia que está activa en la región", dice la analista de Jane's. Además, para el presidente venezolano se trata de balancear lo que considera una militarización de Colombia, que ha recibido más de 5.000 millones de dólares en recursos estadounidenses desde 2000, cuando arrancó el Plan Colombia.

Para despejar temores, Moscú y Caracas dijeron el lunes 8 de septiembre que los ejercicios se habían discutido durante la visita que hizo Chávez a Rusia a finales de julio y se habían concretado entre el 7 y 8 de agosto, antes de que estallara el conflicto con Georgia.

"Son las voces de los pitiyanquis: que si se van a instalar unas bases secretas en Venezuela, que van a poner bombas atómicas; que si vienen unos submarinos nucleares y se van a parar ahí, en la isla de La Orchila, y van a estar apuntando a no sé quién. Ellos comienzan a inventar cualquier cantidad de cosas. No, nosotros todo lo hacemos transparente", dijo Chávez en su programa Aló Presidente.

Aunque la fecha es sospechosa -pues este conflicto del Cáucaso estalló formalmente el 9 de ese mes- lo cierto es que la alianza de Caracas con el Kremlin no es nueva ni promete desaparecer. Entre 2005 y 2006, el presidente Chávez le compró a Rusia más de 4.000 millones de dólares en armamento. Desde fusiles Kalishnikov hasta aviones de guerra, helicópteros de asalto, submarinos y fragatas. Una cifra que, de entrada, lo convierte en el principal cliente del Kremlin en América Latina. En julio, durante su último viaje, Chávez se habría comprometido a adquirir otros 5.000 millones de dólares en armamento durante la próxima década.


Pese a que el Departamento de Estado, en un polémico comentario, se mofó de los rusos indicando que con la maniobra solo querían comprobar si sus barcos tenían el alcance suficiente para llegar hasta las aguas del Atlántico, en el Congreso y la comunidad de inteligencia de EE.UU. el tema preocupa.

Elina Ross-Lehtinen, congresista de Florida, ha dicho que ambos países han regresado formalmente a la Guerra Fría y que su país debe responder adecuadamente. Es probable que el problema escale en los próximos meses dada la agitada coyuntura electoral en EE.UU. y la competencia entre John McCain y Barack Obama para mostrarse como el mejor calificado para actuar como comandante en jefe.

Los ejercicios militares entre ambos países se realizarán una semana después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, previstas para el 4 de noviembre. Cualquiera sean las intenciones, es evidente que las tranquilas aguas del Caribe se están calentando en el contexto del renacimiento ruso y el celo de Washington por preservar intacta su zona de influencia. Un juego que no deja de ser peligroso.


Revista Cambio

lunes, 8 de septiembre de 2008

"Las comparaciones son odiosas..."

Bueno, sí, los sueños, sueños son. Alguna vez, por ejemplo, Paul McCartney irrumpió en el ámbito de los míos, para llevar a cabo una visita relámpago a un pueblo cercano. Recuerdo haberlo visto enfundado en un abrigo negro, en compañía de otros cuatro o cinco individuos, también trajeados de negro, que parecían ser miembros de algo así como una comitiva.

Tras una exhaustiva ronda por calles medio polvorientas, el grupo departió bajo una carpa pública en la cual se servían platos locales y carnes a la brasa. Una multitud se agolpó para observarlos en el acto de comer. Al cabo del almuerzo, los forasteros asumieron a pie la vía principal y desaparecieron en la distancia, por entre unas montañas rocosas en las que abundaba un parque automotor conformado por camionetas del tipo 4 x 4. En verdad, aquel sueño parecía más bien un comercial de Toyota o un videoclip.


El sueño de esta vez se trasladó a una taberna bávara de Medellín, donde varios contertulios deliberaban alrededor de un tema singularmente ocioso y extravagante: las irreconciliables diferencias históricas, culturales, sociales y políticas que puedan existir entre Antioquia y Suiza.

"Eso es como comparar el carácter rústico de una cuchara de palo con la posibilidad relativa de que Barak Obama gane la Casa Blanca", dijo con sorna uno que parecía ser estudiante universitario. "¡Nada que ver!", remarcó el comensal.

Otro de los asistentes pretendió ser aún más punzante y más certero en cuanto a la ninguna afinidad que puedan tener dos cosas: "Yo diría que es como tratar de buscarle el denominador común al ataque de tos de un anciano en Malasia y al impredecible futuro de las acciones del petróleo en la Bolsa de Frankfurt. En verdad, no hay ninguna correlación. Lo mismo ocurre entre sí con Antioquia y Suiza".

De modo contrario y con manifiesta mordacidad, otro de los presentes observó que, aunque mínimas, sí existían similitudes. A manera de ejemplo, citó cómo en el nombre de Antioquia hay la "i", la "u" y la "a", vocales todas presentes en la denominación de Suiza. Tamaña apología dejó medio aburrido al auditorio, que esperaba, si no un gracejo de mayor vuelo, al menos nada de tan escaso calibre.

Cada vez más insólitas, propuestas de corte similar siguieron a las anteriores, hasta cuando los por lo menos ochenta asistentes al lugar entraron todos en la sintonía del tema, que se había iniciado a partir de la presencia de Kurt, un joven ingeniero suizo de paso por Medellín y de novia antioqueña conocida en Zurich.

Desde un rincón del establecimiento se alzó una voz para proponer la exaltación de ciertos contrastes entre las dos regiones. "Aquí, por ejemplo, la gente acostumbra a tomar chocolate al desayuno, acompañado de arepas", afirmó el proponente, antes de preguntar: "¿Cómo es la tradición del chocolate allá en Suiza?". A lo cual el joven helvético explicó que la mayor acogida y comercialización de este producto en su país la tienen las presentaciones en dulcería y confitería. "En particular", relató Kurt, "hay un bocado exquisito, conocido como Zimtschokolade torte (torta de canela y chocolate)".
Escudo de Suiza
-------------------Escudo de Antioquia
"En cambio, a mi modo de ver, hay un elemento bien común", ironizó a su vez un cliente que parecía ser bastante perspicaz. "Miren las formas de los escudos de Antioquia y de Suiza", arguyó, mientras se dirigía hacia un costado de la barra donde estaban ambos íconos, uno encima del otro. "¿No son idénticas?", insistió. "¡Ah, bueno, algo tenemos igual! Por lo menos el molde de los escudos es el mismo".

Irritada con tema tan baladí, una joven trató de atenuar las deventajas históricas y circunstanciales de la tierra de las arepas frente al imperio de la precisión relojera, para lo cual recurrió a la información de internet en su Black-Berry. Gracias a ello, pudo demostrar cómo el área de la primera es por lo menos mayor que el segundo: 63.612 kilómetros cuadrados contra 41.258 de la confederación helvética, lo cual, en verdad, no alcanzó ninguna relevancia en la confrontación de ideas.

Poco después, un señor entrado en años, que espontáneamente asumió el rol de moderador y que pretendió reorientar el debate, puso de presente que mientras Antioquia ha sido escenario histórico de la violencia desde sus más diversos orígenes hasta sus más sofisticadas expresiones, ha correspondido precisamente a Suiza, país emblemático en asuntos de neutralidad, jugar un destacado papel de mediador y facilitador en el largo conflicto colombiano.

"¡Así es! Y no confundamos, porque mucho va de lo montañero a lo alpino", esgrimió una de las asistentes, cuyo estilo denotaba cierta alcurnia, pero también cierta apatía hacia lo vernáculo de la entraña paisa. "Aquí la gente apenas come cuajada, que es un quesito todo lambido, escuálido y carente de gracia. Para colmo, lo envuelven en hojas de plátano. Allá, en cambio, se llevan a la mesa, muy bien ornada, quesos como el Appenzel, el Bagnes, el Bellelay o Tête de Moine, el Gruyère o el Vacherin, que ofrecen una calidad gurmet incomparable". Dicho esto, se oyeron voces en contrario y una que otra procacidad, que calentaron el ambiente.

"¡Las cosas de la historia!", terció la voz solidaria de una matrona que destacaba también por su porte y por su rostro enrojecido al sentir la necesidad de intervenir en la controversia. "Uno dice Guillermo Tell, y de inmediato lo asocia al episodio de la manzana partida por su ballesta sobre la cabeza de su pequeño hijo y a Suiza. Ese fue un héroe legendario, famoso por su valentía y por su puntería. Al mismo tiempo, uno cita el nombre de Pablo Escobar, y por reflejo piensa en esa Colombia socialmente loba, pero sobre todo violenta y a la vez horrorizada y destrozada por el narcoterrorismo. Eso es muy triste, muchachos, que el hombre que más daño le hizo a este país siga siendo como una especie de ícono nacional para la Historia y ante el mundo".

No terminaba la expositora su intervención, cuando una profusión de chispas acompañadas de un tableteo ronco decretó un silencio terminal en el recinto. "¡Las comparaciones son odiosas! Bueno, si no lo sabían, ¡ya lo saben, cabrones!", observó con desdén un hombre rollizo que encabezaba un grupo de cinco que impertérritos salieron caminando hacia la calle por encima de una montonera de cabezas desgonzadas, de miradas sin horizonte, de brazos, manos, troncos y piernas reducidas de facto a la inercia de los maniquíes. Con mínimos vestigios de plomo habían quedado las cinco ametralladoras que acallaron un tema de debate que nunca debió haberse planteado tan lejos de Suiza...

lunes, 25 de agosto de 2008

miércoles, 20 de agosto de 2008

El look del populismo

"El estilo es el hombre", "la pinta es lo de menos" y "el hábito no hace al monje" son aforismos que pudieran servir de punto de partida hacia un debate sobre por qué, cómo y hasta dónde las conductas y la impronta personal de los últimos caudillos surgidos en América Latina inciden en la percepción de sus adeptos, seducidos por una imagen populista que propone un modelo de socialismo necesariamente artesanal, bajo el supuesto de ser capaz de superar la miseria histórica heredada de los políticos tradicionales.

El mosaico que ilustra estas líneas da cuenta de cómo el destino de millones de los seres más pobres del nuevo continente se rige por mandatarios cuyo afán protagónico y de monopolio del poder los convierte en auténticos íconos de la ramplonería y la bufonada, con el agravante de que las grandes masas marginales ven en ellos a genuinos representantes del interés popular. A juzgar por los siguientes estilos y modelos, y según la progresión de estas conductas, el próximo ungido con el favor de las urnas en el Continente ejercerá seguramente en taparrabo o en guayuco.
El caso más fresco en esta secuencia corresponde al recién posesionado presidente de Paraguay, Fernando Lugo (foto superior), quien ha decidido que las pantuflas o chancletas en público le conceden cierto estatus de apóstol de las clases más vulnerables de su país, sumido en la indigencia. En un alarde de cercanía con las masas, que a ojo cerrado lo eligieron, aquí se aprecia al último eslabón de la Teología de la Liberación en el rol de futbolista, papel que asume con el uso de un balón deliberadamente viejo, casi podrido, que simbolice el contenido social de sus promesas de luchar contra el hambre.

Como su homólogo guaraní, el mandatario de Bolivia, Evo Morales, tiene también por seguro que el fútbol —el deporte de mayor arraigo entre sus gobernados, pese a los tradicionales descalabros de su selección nacional y de sus equipos en el área— es una oportunidad inmejorable para proyectar su cercanía con los parias, que son casi todos sus compatriotas, convencidos de que el líder cocalero será capaz de hacerle muchos goles a la historia de padecimientos y explotaciones de esta nación. Es tan desatinado este gobernante, que durante la ceremonia de la entrega de la bandera olímpica a la delegación de su país a los Olímpicos de Pekín-2008 a cuatro paupérrimos deportistas, incluída una nadadora de 38 años, les hizo saber que dicha representación era "una vergüenza". ¡Sin palabras!
El privilegio que quisieran tener muchos de los fans de Diego Armando Maradona (derecha), tutearse con el astro argentino en un campo de fútbol, lo tuvo el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anfitrión de la Copa América 2007. El evento sirvió de antesala al famoso referéndum del 3 de diciembre del mismo año, cuando el electorado respondió negativamente a las aspiraciones del mandatario por abrogarse nuevos poderes. No obstante su ninguna relación con este deporte, Chávez trató de emplearlo como instrumento de propaganda, vistiéndose con la vino tinto para la ocasión y repartiendo buena parte de la boletería entre los afiliados al Movimiento Bolivariano. No deja de ser bien paradójico que tres de los más acérrimos contradictores de los Estados Unidos, como Daniel Ortega (arriba), presidente de Nicaragua; su par venezolano Hugo Chávez (derecha), y el líder cubano Fidel Castro (de chaqueta azul en la gráfica inferior, acompañado de Chávez), apelen al recurso de uniformarse de beisbolistas para promover, precisamente, la causa anti-imperalista entre sus gobernados.
Aunque existen evidencias sobre la práctica de un deporte con un palo y una bola que datan de las primeras civilizaciones egipcia, griega y persa, el béisbol, tal como se juega en la actualidad, es una disciplina eminentemente norteamericana, según investigaciones documentadas, que le conceden su paternidad a Abner Doubleday, oficial del Ejército de la Unión durante la Guerra Civil de los Estados Unidos (1861-1865).

Único presidente argentino con diez años en el cargo (1989-1999), y con la posibilidad de quince, para lo cual —como Alberto Fujimori en el Perú (1990-2000) y como Hugo Chávez— reformó dos veces la Constitución, Carlos Menem es, si no el fundador, por lo menos uno de los más caracterizados representantes de este movimiento de mandatarios con alta proclividad al protagonismo mediante el disfraz y la parodia para ganar adeptos. Al líder del Partido Justicialista se le vio trajeado de tenista, de corredor de autos, de ciclista, de nadador, de paracaidista, sin contar sus exhibiciones en el golf, el polo, el hockey sobre hierba, el baloncesto y hasta de gaucho y de bailarín de tango. En la foto superior aparece poco antes de una de sus proverbiales salidas a una cancha para hacer gala de sus dotes futbolísticas.



(Nota en proceso de edición)

martes, 12 de agosto de 2008

La mano dura triunfa

"Esto, lo que necesita, es mano dura", se oyó decir, como se oía el saludo, a los ciudadanos de muchas generaciones agobiados por el imperio de mal, entronizado en ciudades y veredas, a partir del simple pillaje: ladrones de todas las layas, raponeros, abigeos, asaltantes de bancos y de caminos, estafadores, violadores, etc. Por instinto natural, el reclamo y la visión panorámica del fenómeno de inseguridad se han proyectado puntualmente sobre el ámbito de la seguridad ciudadana.

Con el telón de fondo de una sangrienta confrontación política secular, y cuando se creía parte del mito, dispersa y diezmada, lejos del protagonismo de los años 60, la progresiva reaparición de la subversión desde diversas trincheras se encargaría de aportarle nuevos agentes de perturbación al escenario, bajo los rótulos de FARC, EPL, ELN, M-19, Quintín Lame y otras organizaciones armadas cuyas luchas privilegiaban necesariamente la conquista de las zonas más vulnerables: campos y montañas del territorio, donde la ausencia del Estado ha sido, y sigue siéndolo, la constante histórica.

Vanos todos los discursos y los protocolos por alcanzar una paz elevada a las alturas de la utopía, por lo general los gobiernos pretendieron su conquista mediante el recurso de fusiles y tanques obsoletos encomendados a huestes campesinas impreparadas y hambrientas. Sin embargo, aún reforzada con millonarias inyecciones en dólares, como el Plan Colombia, hasta hoy la iniciativa ha sucumbido a la antigüedad y al mismo tiempo a la modernización de un enemigo parapetado de manera geoestratégica y fortalecido económica y militarmente por la industria más lucrativa del mundo: el narcotráfico.

Como si lo anterior no fuera lo suficientemente letal para una nación mayoritariamente rural, sumida en la desesperanza, la miseria y el olvido, a su vez el narcotráfico armó, consolidó y extendió sus tentáculos y su maquinaria bélica y criminal por vastas zonas del país, a partir de la semilla de las llamadas autodefensas, "los muchachos", como en tono eufemístico los denomina el Presidente actual, legalizadas en Antioquia durante su mandato como gobernador, bajo el más paradójico y perverso apelativo que pueda imaginarse: las "Convivir".

Con la fuente inagotable de recursos provenientes del tráfico de drogas, de la extorsión a las multinacionales del banano, el carbón y el petróleo, del secuestro, y ya sin ningún discurso político que ofrecer, la guerrilla más antigua del mundo ha desdeñado olímpicamente el clamor nacional e internacional en su contra, pues sus intereses particulares son probadamente los de consolidarse en el negocio. Con los mismos recursos y con métodos similares, el narcotráfico optó por una alternativa mucho más ambiciosa, más sutil y más audaz: Acceder a la vida política.

Mientras la subversión tradicional arrasaba poblaciones enteras y secuestraba alcaldes y concejales de las más remotas zonas para imponer allí sus designios, el narcotráfico —que a punta de plomo y descuartizamientos con sierra eléctrica completó la masacre en grandes regiones— los involucraba a su proyecto, pero apuntaba mucho más lejos: a las gobernaciones, a las asambleas y al Congreso, y con ellas acceder a la primera magistratura. Dos décadas atrás, ya la cabeza visible de la mafia, Pablo Escobar, había hecho su arribo al poder legislativo al obtener en las urnas el favor de los más pobres de las comunas de Antioquia.

A efectos de su triunfo político, tan explicablemente dadivoso con la población más vulnerable, y a efectos de su imperio delincuencial, tan terriblemente criminal contra la sociedad, Escobar y toda una generación de capos famosos sucumbieron a la demencia del oro fácil, pero dejaron una nefasta herencia imposible de calcular y con ella a un país hipotecado a los intereses del tráfico de drogas, por donde se le mire, pero sobre todo en la cultura que sembraron: La cultura traqueta, extensiva a todas las capas de la sociedad y de la política.

A este propósito, resulta bien singular la percepción que los colombianos tienen sobre el pasado reciente del país, sacudido entre otros males mayores por el narcoterrorismo, y la coyuntura política actual. Esa franja intangible de la sociedad que entraña el concepto abstracto y de alguna manera tangible de "opinión pública", parece haber hecho, de manera inexplicable, un corte de cuentas entre las irreparables consecuencias que dejaron las acciones terroristas de los carteles de la droga y el momento actual, cuando el país se moviliza unidireccionalmente contra la delincuencia subversiva.

Para una mayoría, la perspectiva de un país en paz pasa por resolver "el conflicto armado", que a su manera de ver está exclusivamente en "las montañas de Colombia", y no en el conjunto y en la generalidad de los problemas derivados de la existencia de ejércitos al margen de la ley, cuales son la guerrilla y los paramilitares, que inclusive ya operan aliadamente. En este río revuelto, en que la primera víctima es la verdad de la Historia, las llamadas ONGs suelen agitar las banderas de los derechos humanos y otras reivindicaciones, pero al mismo tiempo dejan en evidencia su proclividad hacia la subversión. En contraposición, los postulados de la "Seguridad Democrática" del gobierno reconocen subjetivamente que los problemas de violencia y desplazamiento masivo y sus enormes secuelas son apenas producto de la acción guerrillera.

No obstante la presencia de millones de desplazados en busca de una moneda en los semáforos y en las esquinas de las principales ciudades, y lejos de los ruidos y de los escenarios de la violencia generada por unos y otros, es así como el celador, el lustrabotas, el taxista, el ama de casa, el universitario, el ejecutivo, el industrial, fortalecen con su consentimiento o con su indiferencia la popularidad del Jefe del Estado, porque en el fondo el discurso de la seguridad reivindica su mayor prioridad, inclusive por encima del frenético desplome en la calidad de vida.

Al ritmo, y al precio que sea, de una generación compulsiva por el boato, por los relojes Cartier, por burbujas blindadas como no las hay tantas en el tráfico automotor de Buenos Aires, Los Ángeles o Montercarlo, por la vida sibarita, por mujeres a lo "Guardianes de la Bahía", por bacanales y por mansiones al estilo Luis Miguel o Julio Iglesias, es Colombia un país donde el carnaval y los goles se celebran por igual con pocos o con muchos muertos.

Al menos según se deduce de la popularidad récord de su Presidente, es este un país convencido de que por haber vuelto los turistas a las carreteras —para lo cual, como en Afganistán, Bosnia, Irak o ahora en Osetia es necesario movilizar a las Fuerzas Armadas— no está al borde del abismo, sino del sueño americano...

lunes, 11 de agosto de 2008

Hechos y protagonistas de la crisis Rusia-Georgia

La escalada de tensión por Osetia del Sur
Los 30 españoles que viven en Georgia, a salvo
Los agujeros negros de la URSS
El eslabón más débil tras el fin de la URSS
Sarkozy anuncia el envío de su ministro de Exteriores para mediar entre georgianos y rusos
Georgia permanecerá en los Juegos Olímpicos pese a la guerra con Rusia

El polvorín de Osetia del Sur
Las tropas georgianas se retiran. El asedio ruso ha obligado a las tropas de Georgia a retirarse de la capital de Osetia del Sur. Tbilisi y Moscú han confirmado la retirada.- EFE
El polvorín de Osetia del Sur - Las tropas georgianas se retiran
El polvorín de Osetia del Sur - Ciudades desoladas
El polvorín de Osetia del Sur - Mujeres desplazadas por la guerra
El polvorín de Osetia del Sur - Tragedia
El polvorín de Osetia del Sur - Estado de guerra
El polvorín de Osetia del Sur - Centenares de heridos
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Otras fotografías 1 de 17










VLADÍMIR VLADIMÍROVICH PUTIN
A FONDO
Nacimiento: 07-10-1952
Lugar: San Petersburgo









MIJAIL SAAKASHVILI
A FONDO
Nacimiento: 1968
Lugar: Tiflis








Dimitri Medvédev
A FONDO
Nacimiento: 14-09-1965
Lugar: Leningrado
La noticia en otros webs
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Crisis Rusia vs. Georgia

El Consejo de Seguridad renuncia a pedir el alto el fuego en Osetia del Sur por falta de consenso. Putin insta al Gobierno de Tbilisi a poner fin a "la agresión" sobre la región caucásica.
- El presidente georgiano declara el estado de guerra.- El Consejo de Seguridad de la ONU celebra su tercera reunión en menos de 48 horas para tratar de frenar el conflicto.

El Consejo de Seguridad de la ONU ha renunciado este sábado 10 de agosto de 2008, en la tercera reunión que celebraba en menos de 48 horas, a la posibilidad de emitir un llamamiento conjunto al alto el fuego en Georgia por falta de consenso y ha alertado de la extensión del conflicto fuera de Osetia del Sur. "Lamentablemente, mi conclusión es que va a ser muy difícil, si no imposible, encontrar puntos de coincidencia suficientes para elaborar una declaración conjunta", explicó el presidente de turno del Consejo de Seguridad de la ONU, el embajador belga Jan Grauls, tras la reunión del Consejo.

Y es que la situación entre Rusia y Georgia empeora según pasan las horas. Este sábado, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, en una intervención televisiva desde la vecina Osetia del Norte, ha instado a las "autoridades de Georgia a que parecen inmediatamente la agresión contra Osetia del Sur, que paren todas las violaciones de los acuerdos de cese al fuego y que respete los derechos legales y los intereses de otra gente" y ha asegurado que "desde el punto de vista legal, la acción de Rusia es totalmente legítima".

El primer ministro ruso se ha desplazado a Osetia del Norte enclave vecino a la que se ha desplazado para tratar de primera mano el conflicto con Georgia, así como gestionar la huida de los refugiados surosetos que han abandonado la región. Para Putin, "la aspiración de Georgia para unirse a la OTAN está conducida por sus intentos de arrastrar a otras naciones y pueblos en sus sanguinarias aventuras".

La batalla por tomar el control de la ciudad más importante del enclave secesionista se intensificó durante la pasada madrugada con enfrentamientos que, según oficiales rusos, se ha cobrado la vida de más de 2.000 personas, tras los "cientos de muertos" que reconoció ayer el presidente de facto de Osetia del Sur, Eduard Kokoity. Desde Georgia se ha rechazado de pleno el balance de muertos ofrecido por rusos y separatistas osetos, y ha contraatacado asegurando que la cifra de muertos georgianos se eleva a los 150.

Horas antes, el presidente georgiano, Mijail Saakashvili, declaró el "estado de guerra" en el país después de confirmar que ha pedido al Parlamento, donde su partido cuenta con mayoría, que declare hoy mismo la ley marcial para "hacer frente a la agresión militar rusa" en su territorio. La aplicación urgente de una norma que suele aplicarse en situaciones de guerra o rebelión y que otorga facultades extraordinarias a las Fuerzas Armadas para el resguardo del orden público muestra que Tbilisi no se ha intimidado ante la ofensiva rusa. El mandatario georgiano tiene previsto hablar hoy con su homólogo estadounidense, George W. Bush, del que espera sacar un compromiso formal en el conflicto con Rusia así como ayuda para facilitar la vuelta de sus soldados desde Irak.

Rusia tampoco tiene previsto recular. Su presidente, Dimitri Medvédev, ha hablado por teléfono con su homólogo estadounidense, George W. Bush, al que ha comunicado en primera persona que la única salida a la crisis actual es la retirada de las fuerzas de Tbilisi. Medvédev había calificado la situación en la región prorrusa de "catástrofe humanitaria" ante los miles de civiles que están padeciendo la ofensiva georgiana.

Según las autoridades rusas, Moscú ha iniciado una gran evacuación de unos 30.000 civiles en Tsjinvali. Medvédev ha justificado la acción de las tropas rusas en Osetia en la necesidad de "imponer la paz a la parte georgiana" y ha cargado contra Ucrania, otra república ex soviética como Georgia, a la que acusa de apoyar "el genocidio" de Osetia del Sur tras el envío de tropas para respaldar a Tbilisi.

Nueva reunión del Consejo de Seguridad

Una delegación de la Unión Europea (UE), la OSCE y EE UU viaja en estos momentos a Georgia para intentar mediar en un alto el fuego que ponga fin a los combates entre los Ejércitos ruso y georgiano en Osetia del Sur, dijo hoy el ministro británico de Defensa, Des Browne, en declaraciones a Sky News. Previamente se había informado de que funcionarios de la OTAN viajarían en esta delegación, extremo desmentido por la organización.

Por su parte, el ministro británico de Exteriores, David Miliband, está en conversaciones con sus colegas de Europa y Estados Unidos para analizar "cómo detener la propagación de la violencia, asegurar un alto el fuego e impulsar las negociaciones", ha indicado en un comunicado.
Francia, que ostenta este semestre la presidencia de la UE,
ha anunciado esta tarde el envío "cuanto antes" de su ministro de Exteriores, Bernard Kouchner .

En un comunicado emitido por el Elíseo, Francia llama al fin de las hostilidades y a la vuelta del statu quo anterior.

Fuentes europeas han confirmado que el representante de Exteriores de la Unión (UE), Javier Solana, ha intensificado el contacto con el presidente ucranio, Viktor Iouchtchenko, y el secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, con el objetivo de mediar en el conflicto ruso-georgiano ante la escalada de violencia de los dos últimos días.

Abjazia ataca poblados georgianos

Después de la ofensiva de Tbilisi, la caja de Pandora se ha abierto en el Cáucaso. Las tropas de la también separatista Abjazia han decidido mover su ficha por cuenta propia y han lanzando una ofensiva para apoderarse del desfiladero de Kodori, habitado por georgianos y fiel al Gobierno de Georgia.

El presidente del régimen separatista abjazo, Serguéi Bagapsh, ha anunciado que los aviones que atacaron los poblados georgianos en el desfiladero pertenecen a su región. Según datos oficiales, hasta hace poco los separatistas abjazos solo disponían de unos cuantos aviones de entrenamiento de fabricación checa, armados con ametralladoras y bombas de fabricación casera. A lo largo de toda la guerra de secesión en Abjazia, de 1992 a 1995, las fuerzas abjazas, apoyadas por la aviación y unidades regulares rusas, no lograron vencer la resistencia de los montañeses de Kodori.

Rusia y Abjazia acusan a Georgia de desplegar tropas en el desfiladero que, según ellos, supone una violación de los acuerdos de desmilitarización de las zonas colindantes, alcanzado en 1995.