viernes, 17 de agosto de 2012

El auto-maletín, ¡lo último!



Al ritmo frenético con que evoluciona la tecnología, cabe pensar si pronto podremos ver un automóvil al que podamos llevar puesto, como el traje, o que pueda plegarse y tenga cabida en un bolsillo. Por lo pronto, la modernidad y el ingenio han llegado a la que pudiera ser la antesala de esa posibilidad, nunca descartable, según queda en evidencia: el auto-maletín, el Soleil Concept, producto de la ingeniería francesa.

Tamaña creación supone todas las prerrogativas imaginables de espacio en las calles, en las rutas y en los sitios para aparcar, pero al mismo tiempo, y ya en el ámbito de la interrelación social, supone también la consolidación de una tendencia: la individualidad en el concepto de vida, tal como triunfaron las diversas gamas de los teléfonos y toda suerte de computadoras y pantallas móviles.


El plegado es lo que convierte mi diseño en algo único, ya que anula la necesidad de encontrar aparcamiento. Además, se puede cargar en cualquier parte, incluso en tu propia casa, explica Emre Gurel, el creador del Soleil, que, por supuesto, utiliza energía eléctrica para impulsar sus motores, que estarían situados en las ruedas.

Para dotarle de estas características únicas, la carrocería del coche se fabricaría con un compuesto similar a la goma, que protegería a los pasajeros del exterior y a la vez permitiría doblarlo para convertirlo en un coche portátil. Para el chasis, en cambio, se utilizarían materiales ligeros y robustos que le otorgarán la protección necesaria.

El Soleil es un invento capaz de poner fin a muchos de estos quebraderos, un coche urbano de dos plazas que incluye soluciones de diseño para muchos de los grandes inconvenientes de la circulación por ciudades. Su frontal estrecho, por ejemplo, le permite circular con facilidad por las calles estrechas de los barrios históricos, mejorando así la movilidad.

Pero quizá donde reside la mayor ventaja del Soleil es en su capacidad para plegarse. Al llegar al destino y tan solo apretando un botón, el coche se dobla sobre sí mismo hasta alcanzar la forma de una maleta con ruedas. De este modo, el conductor puede llevárselo a cualquier parte sin tener que dar vueltas y vueltas para encontrar aparcamiento o tener que pagar una pequeña fortuna por una plaza de garaje.


El Soleil es el coche perfectamente portátil que te podrías llevar a la oficina, a tu casa o incluso al restaurante en el que has quedado para comer.

El principal inconveniente del Soleil es que, de momento, es solo un diseño finalista en el Michelin Challenge Design, un concurso para promocionar y dar más visibilidad a la innovación y el pensamiento creativo aplicado a la creación de nuevos conceptos para automóviles.


De prosperar propuestas como la del Soletil, una misma estrecha calle de hoy podrá ser bien diferente en el futuro: Más viable, más apacible, menos contaminada...

No hay comentarios: